Director/Directores: Craig Mazin, Neil Druckmann
Año de Lanzamiento: 2025
Género: Drama, Acción, Postapocalíptico
Siempre he sido un gran defensor del formato tradicional de un episodio por semana en las series. Siento que así se saborean y disfrutan más, además de otorgarle un mayor valor individual a cada uno de los episodios, así como dar paso a una constante reflexión y expectativa (o incertidumbre) a lo largo de las semanas, que de otra forma sería toda una experiencia bastante más efímera. Uno de los mejores ejemplos que se me ocurren para defender este formato es la primera temporada de The Last Of Us, la cual creaba en mí un sentimiento de evento cada noche de lunes que, acompañado de buenas cantidades de comida y bebida, ponía un broche de oro al que normalmente suele ser el día más duro de la semana. Dos años después, nos llega su segunda temporada, y hace apenas unos días ha puesto punto y aparte hasta, por lo menos, dentro de otros dos años. Voy a hablar sobre la adaptación de lo que, sin duda, ha sido uno de los mejores videojuegos que he jugado en mi vida. Esta segunda historia es, con gran diferencia, mucho más compleja que la original: presenta más capas, mayor profundidad, luchas morales, una mayor diversidad de personajes y temas crudos a tratar. Por ello, llevarla a la televisión era una tarea considerablemente más difícil, que llenaba de preguntas a los aficionados. En líneas generales, ya entrando en faena, considero que esta temporada ha pecado de dos de los que quizá son los peores errores posibles a la hora de adaptar una historia ya escrita. Por un lado, no haber trasladado de forma adecuada a algunos personajes vitales para la trama, lo que deja en evidencia una nula construcción de los mismos, así como su escaso desarrollo y profundidad —algo que comentaré más adelante—. Y por otro, la sensación de prisa en el viaje que, una vez más, sacrifica el tiempo necesario para elaborar y forjar la personalidad de Ellie. Por supuesto, no todo en ella es negativo. Su diseño de producción, la atención a los detalles, sus sutiles referencias visuales y, lo más importante, unas interpretaciones con capacidad de transmitir, son lo que dan luz y juegan a favor de la más reciente propuesta de HBO.
Creo que es conveniente hablar de cada uno de los personajes para dejar constancia del trabajo —o la falta de él— que se ha puesto en ellos: Joel (Pedro Pascal): Es, sin ninguna duda, el diamante en bruto de la temporada y quien lleva con firmeza el rumbo cuando está presente. A día de hoy ya existen campañas en internet para que Pedro Pascal sea nominado a los Premios Emmy, y no es para menos. La capacidad actoral que tiene para transmitir lo que está sintiendo solo con su mirada —especialmente en la escena con la psicóloga en el primer episodio y durante todo el sexto, en los flashbacks de los diferentes cumpleaños de Ellie y la posterior confesión en el porche— es, simplemente, lo mejor que nos podemos llevar de ver esta serie. Ellie (Bella Ramsey): Seré claro: Bella Ramsey hace un gran trabajo actoral. Su falta de parecido físico con el personaje es algo que estoy cansado de leer, y que demuestra cuántas personas no saben ver más allá de lo que ven con los ojos. Hay que saber distinguir el trabajo actoral del trabajo de guion, siendo en este último donde verdaderamente reside el problema del personaje. Ellie, en el videojuego, se ve consumida por su deseo de venganza, entrando en una espiral de violencia explícita donde pone en riesgo y sacrificio todo aquello que tiene y todo lo que sea necesario. Se convierte en una asesina nata que te hace perder la cuenta de las víctimas que pasan por su navaja. Los tres días en Seattle se convierten en una matanza. Esa caída es progresiva, fruto de un cóctel de sentimientos que se siembran desde el potente final de la primera entrega hasta el punto de partida —tan necesario como doloroso— para que exista una segunda parte: el asesinato de Joel. Su contrapartida televisiva, directamente, no tiene un arco de desarrollo. Es el mismo personaje de inicio a fin. No hay una caída pronunciada hacia lo que podríamos llamar “el lado oscuro”. Su rostro no refleja rabia ni tristeza a lo largo del viaje, ni el peso que debería llevar a cuestas. Y por no haber, no hay más que cuatro asesinatos: los tres necesarios para la historia (Nora, Owen y Mel) y un soldado Wolf al azar. No hay sed de venganza ni carácter. Más bien, refleja dudas sobre la continuidad de la misión, debilidad, y prioriza mantener su recién inaugurado noviazgo. Los únicos momentos en los que el personaje de Ellie funciona son aquellos en los que está acompañada de Joel… y este es uno de los motivos principales por los que esta temporada ha sido un fracaso. Quiero destacar el excelente trabajo dual que desempeñan en el sexto episodio, titulado “El precio”, donde se define perfectamente la relación entre ambos. Muy emotivo, y de lejos el mejor episodio de toda la serie. Dina (Isabela Merced): Una de las sorpresas de la temporada. Personalmente, la mejor interpretación junto a la de Pedro Pascal. Se le da una vuelta al personaje, con más participación, pero sin modificar su esencia. Tommy (Gabriel Luna): Muy decepcionante la nula adaptación y el escaso desarrollo que tiene el personaje. Es incluso peor que el de Ellie. Cuenta con uno de los errores más garrafales de la temporada, y, sorprendentemente, no he leído a nadie hablar de ello. En los primeros minutos del videojuego, Joel le confiesa todo lo que hizo en el hospital, haciéndole consciente de la situación y del porqué de la actitud de Ellie con él. Aquí no sabemos nada: si lo sabe o no lo sabe. Falta contexto. Simplemente se nos presenta como el pseudo-sheriff de Jackson, y ya. No se le sitúa en el mismo punto vengativo que Ellie, ni se muestra el rastro de muertes que también él deja por el camino. Me gustaría saber cuál es la visión que tiene el espectador que desconoce la existencia del videojuego. Aceptaría esta versión más racional si no fuera porque su papel resulta determinante en el tramo final de la historia... Abby (Kaitlyn Dever): Es una pena que, desde los primeros minutos del personaje, se nos deje claro cuáles son sus motivaciones, sin dejar espacio a la intriga y a la sorpresa llegado el momento. Más allá de eso, me ha gustado todo lo que he visto de ella. Tengo buenas expectativas de cara a la siguiente temporada. Jesse (Stephen A. Chang), Owen (Spencer Lord) y Mel (Ariela Barer): Apenas tienen minutos en pantalla, así que el espectador medio no empatiza con ellos y, posiblemente, ni siquiera recuerda sus caras. Cuando llegan sus respectivas muertes, el sentimiento es de total indiferencia. Gail (Catherine O’Hara): Este nuevo personaje es muy interesante. Ayuda a conocer más a fondo a Joel y Ellie mediante su profesión como psicóloga, utilizada como recurso narrativo ante la falta de tiempo físico. Una decisión muy inteligente y acompañada, además, por una grande de Hollywood. Era evidente dónde iban a decidir hacer el corte al final, pero no puedo evitar pensar en cómo habría podido ganar solidez esta segunda temporada si hubieran dado menos pasos, pero con más firmeza. Hay mucho contenido eliminado y algunas escenas que no aportan gran cosa (como la de Ellie llegando a la isla de los Serafitas para, minutos más tarde, volver por donde ha venido). El videojuego y la serie son medios diferentes, y entiendo que deban hacerse cambios para adaptarse a la naturaleza de cada uno. Cuando tomas el control de Abby, tu implicación con el personaje es evidentemente más activa, y se produce de forma automática, segundos después de dejar a Ellie. Aquí, van a pasar años hasta que llegue ese momento, y tengo dudas sobre la capacidad de la serie para retener a un porcentaje importante de la audiencia que aún se encuentra asimilando la pérdida de Joel. Recientemente, el showrunner de la serie, Craig Mazin, ha expresado la posibilidad de una cuarta temporada para completar la historia, lo cual deja ver, de forma clara, una cierta improvisación a la hora de plantear la serie, algo que inevitablemente provoca que el producto acabe resintiéndose. ¿Cómo es posible que no exista una proyección clara, definida y cerrada de cómo se va a estructurar la historia? ¿Vas a echar el freno a partir de ahora? ¿Vas a añadir mucho más contenido para llegar a esa vaga previsión de temporadas? ¿Quieres darle un tiempo extra a Naughty Dog para que escriba un tercer juego? Sea como fuere, ahí estaré el día del estreno, con mis palomitas preparadas.
"Si Dios me diera otra oportunidad... lo volvería a hacer. Y no me arrepiento."